De forma inconsciente atraemos a nuestra vida y nos sentimos cómodos con personas con niveles de autoestima parecidos a los nuestros.
Nuestras relaciones afectivas son por tanto un preciso termómetro de nuestro grado de autoestima. Las relaciones más desastrosas se dan entre aquellas personas que tienen un bajo concepto de sí mismas.
El principal obstáculo en una relación íntima es el miedo y la creencia subconsciente de no ser merecedores de amor. El concepto que tenemos de nosotros mismos configura nuestro destino y comportamiento. Es decir, siempre se materializa en una profecía autocumplida el concepto que tenga de mi mismo y de mi valía. Inconscientemente provocaré y atraeré situaciones a mi vida que pongan de manifiesto la razón que tengo al creer que no soy digno de amor, saboteando una relación y cualquier atisbo de felicidad. Elegiré entre tener razón antes que ser feliz.
Es muy importante distinguir que estos mecanismos siempre son inconscientes, automáticos; por lo que es importantísimo ocuparnos de la labor de conocerlos y sacarlos a la luz para poder transformar nuestra vida.
Es imposible dar hacia fuera lo que no tengo dentro. Si no me respeto a mí mismo y no disfruto de cómo soy, me queda muy poco que dar, excepto mis necesidades insatisfechas. Así en vez de buscar a gente a quien admirar y con quien compartir la alegría de vivir; buscaré gente en función a lo que los demás puedan hacer por mi; o que no me condenen o a las que pueda impresionar.
En la profundidad inconsciente de nuestro ser se presenta la siguiente obviedad: si no me acepto a mi mismo ¿cómo puedo aceptar que me amen?; estaré más cómodo en mi sitio, es decir en una relación que ponga de manifiesto que no soy merecedor de tal amor, sintiendo que lo que el otro siente por mí no es real ni duradero.
Desde la falta de autoestima siempre me convierto en un saboteador del amor.
La confianza en mi capacidad y en mi valía y la habilidad de verla y apreciarla también dará lugar a profecías que se cumplan por sí mismas, haciendo posible mantener relaciones plenas y equilibradas con las que crecer y disfrutar de la vida.
Cinthia Garcia dice
Me interesa
Salomé Gonzalo dice
¡Hola Cinthia!
Está en tus manos tomar la decisión de realizar un proceso, un acompañamiento personalizado, para descubrir tus programas limitantes, y mejorar tu autoestima. Todo lo que transformas en tu interior, tiene su reflejo en tu vida.
Un abrazo