¿Cómo puedes olvidar a alguien a quien amas pero no te quiere?
¿Cómo puedes soltar a alguien a quien amas, pero que no le conviene a tu vida?
¿Cómo olvidar a alguien que ha decidido irse de tu vida, por propia voluntad y en contra de la tuya y a quien sigues amando y extrañando?
Tú, tu pareja o ambos, habéis decidido no seguir el mismo camino; sin embargo…sigues anclado al otro y te sientes incapaz de soltar, olvidar…y volver a empezar.
Ya sé que si estás en esta situación, la idea o creencia que continuamente martillea tu cabeza es que no hay nadie como él o ella; que no vas a encontrar nada igual, ni a volver a vivir lo mismo; incluso que el amor o la pareja es algo ya vedado, inaccesible o terminado en tu vida.
¿Cómo lo sé? Porque estos pensamientos también han estado aporreando mi mente en algún momento de mi vida, y porque he acompañado a cientos de personas en su proceso de ruptura y abandono.
Así que estos pensamientos tan comunes y normales, por el hecho de que sean habituales, no significa ni mucho menos que sean verdad. De hecho… ¡son una gran mentira!
La gran mentira que nuestra mente utiliza para mantenernos aferrados y amarrados a algo que ya toca soltar.
Y hasta que no sueltes, siento decirte que estos pensamientos y creencias se harán realidad y se materializarán en tu vida.
Lo más importante que quiero transmitirte con mis palabras, es que todas esas ideas y creencias de exclusividad y carencia, no son más que ideas y además… ¡son una gran mentira!
Y es todo esto, que hay en tu mente, lo primero que tienes que soltar; porque esa porquería de creencias, sino, se convertirán en tu verdad.
La realidad, es que hay vida más allá…más allá de ésta o aquella persona.
La realidad es que hay muchos peces en el mar; y la realidad es que en un universo donde todo es abundancia, llegarán nuevas oportunidades si nos abrimos a ellas y creamos el espacio necesario para que lleguen. Imposible si no soltamos, si no olvidamos, si no decidimos pasar página.
El amor no se va cuando alguien se marcha de tu vida; porque el amor está en ti; emana de ti y eso nadie puede arrebatártelo. Puede irse el objeto de tu amor…pero no la fuente del mismo. Simplemente porque la fuente del mismo ERES TU.
La vida y el amor a veces nos ponen duras pruebas; y una de esas duras pruebas, puede ser dejar ir al ser amado; porque desde el amor, entendemos que es su camino y lo mejor en su evolución y en la tuya propia.
Incluso aunque no lo entendamos ni lo aceptemos, si el otro decide irse, va a pasar, sin que podamos hacer nada al respecto.
Es mucho mejor para nosotros, vivir la experiencia de la ruptura de pareja, desde la aceptación, incluyendo la aceptación del dolor que nos provoca; que desde la lucha, el rechazo, la desesperación y el estancamiento.
Esta actitud requiere un elevado nivel de conciencia, auto respeto, amor y compasión por uno mismo.
No podemos retener a nadie, porque nadie nos pertenece. Nadie se quedará en nuestra vida más tiempo del que decida.
No podemos, ni debemos, retener nuestra propia evolución ni la de nadie.
Hay dos opciones. Dos caminos. Dejarle ir con dolor; o luchar y retener con mucho sufrimiento.
Quedarte aferrada a ese sufrimiento, o adentrarte en la aceptación, después el dolor… para llegar finalmente a la liberación.
La realidad es que si alguien ha decidido firmemente irse de tu vida, se va a ir de todas formas; así que… ¡ayúdale a hacer las maletas!
En mis procesos de coaching gestionando una ruptura de pareja, he visto personas sufrir enormemente por su propia resistencia; porque se niegan a aceptar la realidad, alargando el sufrimiento inútilmente sin posibilidad de cambio; estancando su vida en el resentimiento y la desesperación.
He visto personas estancarse durante años, incluso el resto de sus vidas en el victimismo y el resentimiento.
Aceptación, es el paso ineludible para poder llegar a la liberación.
¡La vida no está para desperdiciarla! ¡No te quedes ni un minuto más de lo necesario estancado en el dolor!
Hay un amor que sí es para toda la vida; el que tienes por ti mismo. Quizás sea el momento de cultivarlo y regarlo. Demuéstrate tu amor, no dejando que el sufrimiento se enquiste en tu vida.
Si todo está terminado, devuélvele su libertad y coge tú la tuya.
Si estás en una situación parecida, seguramente no es porque quieras estarlo; es que no sabes cómo salir de ello; así que no pierdas ni un minuto más. Hay miles de profesionales que llevamos años acompañando a cientos de personas ayudándolas a salir, retomar las riendas de su vida; y a que como el ave fénix puedan resurgir e iniciar una nueva vida, un nuevo camino totalmente diferente, con nuevas ilusiones y lleno de posibilidades. Pero recuerda que para que se abran nuevos caminos hay que dejar bien cerrada la puerta que nos resistimos a cerrar.
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